Instalado en Bruselas desde hace años, Josep Maria Balanyà es uno de los tesoros ocultos de la escena musical catalana. Atrevido, intrépido, llega al escenario de la sala Jamboree para presentar “Don’t Mind”, su última obra de creación libre al piano. Tras iniciarse en la Barcelona del sonido layetano, Balanyà se trasladó a Suiza donde profundizó en el terreno de la experimentación musical y la performance. Su catálogo comprende 140 obras. Ha editado 15 discos. Sus proyectos han contado con la colaboración de músicos de primer nivel, incluyendo a Claudio Pontiggia, Hans Koch, Joachim Kühn y Carlos Zíngaro, entre otros.
Josep-Maria Balanyà piano.
Fotografía de Esther Cidoncha.