Texto y selección: Manuel Recio
Esta semana hemos seleccionado – como ya hicimos con el jazz de otoño en Nueva York– unos de los estándares más famosos de la historia del jazz, I’ve got you under my skin, para hacer un extenso repaso por algunas de sus versiones más memorables pero también más curiosas, originales y desconocidas. Sin duda, pocos han sido los grandes que no lo han incluido en su repertorio. Desde las grandes voces como Frank Sinatra, Dinah Washington o Diana Krall hasta versiones instrumentales sorprendentes como las de Charlie Parker, Bill Evans o Stan Getz.
En 1936 el prolífico Cole Porter -al que ya diseccionamos en esta extensa lista– autor de uno de los repertorios más amplios del jazz, compuso I’ve got you under my skin. Ese mismo año se estrenó dentro del musical «Born to dance» interpretado por la cantante Virginia Bruce. Durante esa década pocos fueron los crooners que no se atrevieron a grabarla.
Pero no será hasta 1946 cuando Frank Sinatra, la Voz, se atrevió con ella y la cantó por primera vez en una show radiofónico. De todas las versiones que grabó, tal vez la más recordada sea la que registró para Capitol en 1956 con un inolvidable arreglo de Nelson Riddle.
I’ve got you under my skin es un clásico del Real Book del jazz al que le sientan de maravilla los arreglos de Big Band. Diana Krall, Ella Fitzgerald, Julie London o Dinah Washington con un espectacular dueto con Clifford Brown hicieron aproximaciones muy loables. También cantantes masculinos como Louis Prima, Oscar D’Leon o Rod Stewart (sí, el mismo Rod de voz rasgada y rota).
En el lado instrumental destacan la pausada versión de Charlie Parker y la bopeada de Bill Evans, la melosa de Stan Getz o la latina de Ray Gelato. En la guitarra de Birèli Lagréne suena apacible y esponjosa. Y para acabar dos rarezas: la de la hispano hondureña Eva Cortés con una inspiradísima adaptación al castellano y la inclasificable versión de Julio Iglesias. Sin comentarios…