Texto y selección: Manuel Recio
En verano, las ciudades españolas se pueblan de festivales de jazz. En muchos de ellos nuestros protagonistas estarán o han estado presentes. Como suele decirse, son todos lo que están, pero no están todos los que son. El jazz español navega en un estado de gracia. Propuestas de lo más variado llenan salas y festivales. Unos más veteranos, otros más jóvenes; innovadores, clásicos, mestizos, incluso vanguardistas. Pianistas, vocalistas, saxofonistas… en joyas del jazz español queremos ser testigos del buen momento que atraviesa el jazz hecho en nuestro país.
El saxofonista Pablo Hernández es el líder y fundador de Sinouj, una propuesta interesantísima de jazz fronterizo que une sonidos propios del jazz con músicas mediterráneas, del Magreb y de Oriente Medio. Siguiendo con la temática arabesca, el pianista compostelano Abe Rábade presenta con su trío una amalgama de influencias en ‘Arabesco da Iria’.
El veterano Agustí Fernández es tal vez uno de los mayores exploradores que hay en nuestro país de nuevas texturas y sonoridades, no solo en el jazz, sino también en el piano. La melancólica ‘La niña de la calle Ibiza’ es solo una muestra de ello. Por su parte, es raro no ver al magnífico pianista Moisés P.Sánchez al frente de algunos de los proyectos de jazz más solventes de Madrid.
El saxofonista y compositor Josetxo Goia-Aribe se junta nada más y nada menos que con grandes nombres como el contrabajista Baldo Martínez para el imprescindible ‘Hispania Fantastic’, una colección de melodías y expresiones populares de España. Precisamente la batería de este proyecto, Lucía Martínez, en su proyecto en solitario, ‘De viento y sal’, hace lo propio con el cancionero gallego.
La aportación vocal la hacen los sevillanos O Sister!, una original banda de jazz años 20 que basa su repertorio en la música de las Andrew Sisters. Ya consolidado, el menorquín Marco Mezquida deja claro sus excelentes dotes como improvisador en ‘Always Late’. Un contrabajista, el vasco Ander García, con su alabado disco ‘Ttun-Kurrun’ ofrece una inteligente mezcla de jazz vanguardista y folclore vasco. Para finalizar el saxofonista malagueño Ernesto Aurignac demuestra en su disco ‘Uno’ por qué es uno de los mejores instrumentistas del jazz actual.